WOODY ALLEN
EE.UU.
1976
No tengo una idea clara del motivo que me hizo fanático de esta película como a los 10 años.
Ya tenía una cierta predilección por las historias de Allen y en una antigua revista miscelanea había leído sobre esta historia. Al verla quedé impresionado, la plasticidad de su narraciòn, la gran cantidad de situaciones y lenguajes estéticos (stand up, radioteatro, teatro, dibujos animados, documental social...). Durante muchos años la volvía a ver y la disfrutaba como la primera vez pues es tan abigarrada que me era imposible recordarla por completo.
Woody Allen puso en la pantalla al insignificante hombre moderno, lleno de complejos, miedo, neurosis, e inaugura la comedia urbana. Con sus habituales homenajes a Bergman, por esta cinta recibió su primer y único Oscar. De paso instala a Diane Keaton como la musa urbana por excelencia: bella, despreocupada, desordenada. Ambos se complementan perfectamente y la película está construida con múltiples escenas improvisadas.
Es una trivialidad narrada de manera magistral, es el relato de un recuerdo, una historia conversada que va y viene en el tiempo. Siempre será una de mis películas favoritas.
Woody Allen puso en la pantalla al insignificante hombre moderno, lleno de complejos, miedo, neurosis, e inaugura la comedia urbana. Con sus habituales homenajes a Bergman, por esta cinta recibió su primer y único Oscar. De paso instala a Diane Keaton como la musa urbana por excelencia: bella, despreocupada, desordenada. Ambos se complementan perfectamente y la película está construida con múltiples escenas improvisadas.
Es una trivialidad narrada de manera magistral, es el relato de un recuerdo, una historia conversada que va y viene en el tiempo. Siempre será una de mis películas favoritas.
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