sábado, 24 de agosto de 2013

THE WALL








ALAN PARKER
1982

Siempre he pensado que la dictadura de Pinochet fue un período muy curioso de nuestra historia. Se censuró una serie de obras y películas completamente inocuas y se dejó pasar otras que las dictaduras del mismo corte prohibieron.

Tenía como 7 u 8 años cuando esta película llegó a Chile y a esa edad yo era fanático de los dibujos animados y los programas de música de los fines de semana. 

Se me hacía agua al cerebro viendo los clips con esas animaciones monstruosas que cambiaban de forma y los actores envueltos en niebla, marchando con máscaras y cantando melodías marciales que taladraban mi psique. Mi decepción con la vida crecía al no tener la edad necesaria para verla (21 años). Iniciada la pubertad, en la media, saberse la letra de las canciones era un paso a la adultez y haber visto la película te hacía pasar a un extraño olimpo de energúmenos mentales protomarxistas freudianos.

     


miércoles, 14 de agosto de 2013

PSICOSIS




ALFRED HITCHCOCK
1960

Esta es otra de las películas que desde la infancia me ha perseguido. Debo reconocer que verla en tv es un poco engorroso, debido a su ritmo, pero teniendo paciencia se puede gozar de una obra maestra.

Todos los tarados que se dedican a encontrar defectos a las películas tienen una dura tarea con el viejo Hitchcock. Incluso con los medios más artesanales es capaz de desafiar leyes físicas, manejar el tiempo a su antojo, ser obsceno y sanguinario con extrema elegancia.

Mi madre me contaba esta película cuando era niño y tenía especial cuidado en encender mi curiosidad.

Ahora la veo símplemente para gozar su factura, es una película absolútamente hecha a mano Anthony Perkins diseñó sus propias escenas en conjunto con el director de fotografía y decidieron las luces a usar y la posición de las cámaras.

 Los gringos la filmaron de nuevo hace poco, dirigida por Gus Van Sant, en colores y con Vigo Mortensen: es un espantoso fiasco. 

miércoles, 7 de agosto de 2013

EL PADRINO

El Padrino -DVD

FRANCIS FORD COPPOLA
1972

Definitívamente son pocas las películas recientes que me satisfacen, algunas me pueden gustar, pero este espacio es para hablar de las producciones que de alguna forma han marcado mi vida. 

Desde que tengo memoria mi madre hablaba de "EL PADRINO", con el tiempo le tomé el peso a este juicio, pues ella odia a Marlon Brando y decía que esta era la única película en la que no parecía un homosexual reprimido, maltratador de mujeres.

Con esos antecedentes, finálmente la vi en su estreno en TV en canal 13, en los '80, en nuestro viejo televisor en blanco y negro, en una época en que las películas de grán formato se daban en dos episodios, de un domingo a otro, llenas de tandas publicitarias y sin un cuidado por respetar la banda sonora. 

La película fue inmune.

La violencia, dura pero ritmada, que Coppola le aprendió a Kurosawa, convierte a los asesinos de la mafia en coreógrafos del crimen.

Mención a parte la caracterización de Brando de quien publico una foto del mismo año 72.



martes, 6 de agosto de 2013

AKIRA




KATSUHIRO OTOMO
1988


Hay películas que llegan sin que uno se lo espere y nunca más se van.

No recuerdo que edad tenía, pero me parece que hace poco había terminado el colegio y en casa de un amigo vimos un VHS de esta producción. Desde la secuencia en que Yamagata baja por la escalera de entrada al bar, nuestra actitud fue una sola admiración que durante toda la película no fue interrumpida más que por breves exclamaciones de sorpresa. Yo creo que gran parte de la fascinación tiene que ver con la violencia épica, distinta a toda la que se había visto hasta ese momento o la psicopatía llevada a niveles mesiánicos.

Fue la primera banda sonora original que me compré y uno de los primeros discos de mi colección y vale por sí misma.

 Los gringos, en su infinita estupidez, han estado tratando de filmar una versión con actores reales (como si hiciera falta), el proyecto se empezaría a rodar en 2014.  




   

viernes, 2 de agosto de 2013

LA NARANJA MECÁNICA









Stanley Kubrick
1971

Nuévamente el viejo Kubrick da una lección que trasciende las décadas. Sólo él le podía dar a la violencia cruda un sabor sinfónico. No me puedo imaginar una sola escena de esta película que no se haya convertido en un emblema del cine universal, como casi todo el trabajo de Kubrick, así como esa mirada irónica sobre la tragedia y el terror. 
La vi a los 13 años, lo que demuestra la irresponsabilidad de mis padres, y me pareció una película erótica, a esa edad quién no quiere ser un Alex De Large, saltarse todo, tener sexo todo el día, no sentir ninguna obligación salvo juntarse con los amigos a consumir drogas y planear el siguiente golpe. Y fue exáctamente eso lo que le causó problemas en todo el mundo; fue censurada en Inglaterra, en donde se le acusó de aumentar los índices de violencia, nuévamente las autoridades incompetentes culpan a otros por su incapacidad; en Hollywood estuvo nominada a varias categorías, pero no recibió ningún premio.     

Años más tarde me hice con el libro, escrito por Anthony Burgess, y frente a él la película es una fábula infantil.